En Colombia, las emisiones de gases efecto invernadero (GEI) provenientes de los residuos se incrementaron 131 % entre 1990-1994. Bogotá recicla apenas 15 % y dispone más de dos millones de toneladas de basura al año en un relleno sanitario al que le quedan cuatro años de vida útil. Con la COVID-19, este escenario empeorará. Este equipo propone varias palancas para la ciudad, con opciones operativas, económicas y de política pública para escalar los esfuerzos de separación en la fuente, impulsar la reintegración de los residuos al ciclo económico y beneficiar las cadenas de valor asociadas al reciclaje y a la reutilización de residuos. Esto ayudará a mitigar la emisión de GEI, la contaminación del suelo y de fuentes hídricas generada por la infiltración de lixiviados en el relleno.